05 mayo 2010

cuando estas noches quisiera saber menos y dar marcha atrás al poder de mis observaciones. el grado de esta lucidez no tiene madre, ni perdona. si no fuera por el amor que doy y recibo, o por mis estudiantes, el mundo acabaría conmigo bien pronto. tan fácil y bonito que sería tener un par de chamacos y esperar el fin de semana para ir al parque. a veces ese algo que no tengo me parece simple y me conformo con ver crecer a mis sobrinos por puro miedo. acompañarlos me ha ayudado a entender la prioridad de los niños. pienso en todos mis amigos y su hijos, en mi familia y sus hijos. siento un respeto profundo por su valentía y su fe contagiosa de frente a lo que hay. las cosas simples son más difíciles de reconocer, comparto una lógica cegadora con un montón de ilustrados.

hoy vomité en el baño, por primera vez de pura náusea. hay tanto que no comprendo y una cabeza como la mía no sabe de treguas.

necesito algo hermoso.
me siento libre cuando corro. procuro ese calor en mis mejillas y en mis piernas, en los pulmones.


anoche soñé que era una esfera, un universo completo y transparente que viajaba en el tiempo a una velocidad constante. antes me pregunté qué era la luz y por qué la oscuridad del vacío y de las cosas tristes. salí a caminar al patio a las tres am y encontré un montón de estrellas.

2 comentarios:

jose fá dijo...

la mejor hora para encontrar amontonadas las estrellas. La hora de los fantasmas...

Y un abrazo

Miriam García Aguirre dijo...

Estimadísima:

Si todo sale bien y no se estrella un cometa en mi patio (o en mi cabeza) nos veremos muy pronto.

Aquí te dejo también un abrazo.