28 junio 2010

Una serie de cinco

[1]

Cuento. Si aparece sabré cómo matarlo.



[2]

Bicéfala. 1. Mujer con migraña y baja presión. 2. Mujer, dos cabezas piensan mejor que una -pero qué mitote. 3. El cerebro se divide en dos hemisferios. Cada uno es responsable de funciones particulares, indispensables. Ambos sostienen una intensa y vital comunicación con el cuerpo a través del sistema nervioso. (Suceden millones de cosas dentro de mí que no entiendo). 4. Existe una in-tensión entre sentir y escribir, emoción y lenguaje. 5. Esta historia se trata de un conflicto entre dos hemisferios, en medio hay una mujer extraña como su nombre: Bicéfala.]



[3]

Anoche soñé que era una esfera, un universo completo y transparente que viajaba en el tiempo a una velocidad constante. Antes me pregunté qué era la luz y por qué la oscuridad del vacío y de las cosas tristes. Salí a caminar al patio a las tres am y me encontré un montón de estrellas.



[4]


Pensaba en la crisis de la masculinidad esta tarde, manejaba rumbo a mi clase de las cuatro. Me detuve en los anclajes, los referentes y los significados; en la transformación permanente y la creatividad necesaria para redefinir ese binomio indisoluble lugar y tiempo; en los viejos monolitos frente al desequilibrio en la balanza del poder. Así, en un instante, rehíce los conectes entre el machismo exacerbado, el feminicidio, el narco, la esclavitud, los divorcios y tanta méndiga tristeza y todas esas cosas que me pregunto cuando soy dueña del volante. Me sentí emocionada y compartida al generar un nuevo equilibrio universal al repetir como mantra fifty-fifty, fifty-fifty. Subía el puente de la uni cuando iniciaba otra discusión sobre algo más que no recuerdo.


[5]
 
 
Tengo el amor en la punta de la lengua. En la saliva. Y, también, los ojos empañados. Uno de estos días he de llorar. No hay duda, me cansan los diálogos que sostengo con la chamarra que dejaste colgada a las cinco de la tarde. Prometí esperar...

[5.1.] Extraño tus calcetines.

[5.2.] El olor de tu ropa tirada junto a la cama.

[5.3.] Hasta el frío de esa habitación que nunca se calienta.

[5.4.] Sobre todo El S i l e n c i o, Ese Lugar preciso donde fuimos.

[5.5.] De intentarlo la lista sería más larga. Con tanta cosa, me aburre escribir sobre mis lamentos y es esto lo que sale. No caben ya en otro sitio, ni dentro de mí y se me derraman.





-Publicado en la revista electrónica Espiral 28.

21 junio 2010

(Me está creciendo una ramita).

En el jardín de mis abuelas están brotando plantas silvestres de hojas pequeñas que al multiplicarse lo cubren de una especie de alfombra de tréboles de la suerte.

Mis tías se empecinan en contratar a un jardinero podador de plantas silvestres.

Yo prometo mantenerlo limpio y verde. Acorazonado.


(Gracias Daniel, Mayte, Lety, Alfredo, Lore, Rosa, Charo,Tía Laura, Twisted Sisters y Mamá -como siempre-;  Eli, Keta, Charla y al Carlos Sánches también.)

17 junio 2010




La felicidad llega en pequeñas dosis
 como el amor.

02 junio 2010

bici

Fue la libertad primera, largos veranos llenos de aventuras. Entonces, la calle también era nuestra.

Hoy la bici es frente a un espejo, acompañada de mujeres que suben colinas imaginarias y descienden a toda prisa, que cruzan La Línea y llegan hasta el centro de San Diego contando series del 1 al 8: uno... dos... tres... cuatro... cinco... seis... siete... ocho... Mambo!  Mujeres de sonrisas generosas, de carcajadas. La felicidad aparece en lugares insólitos, como el amor.

27 mayo 2010

La palabra modernus utilizada al comienzo de la era Cristiana y referida a la duración de una generación, se transforma hacia la mitad del siglo XIX en una palabra que designa sobre todo el “cambio de la moda de tendencias actuales del gusto literario…”, dejando de oponerse “cronológicamente a un determinado pasado”. En esa medida, irá perdiendo peso la rivalidad clásica entre antiguos y modernos o entre románticos e ilustrados, y en su lugar irá ganando peso una contraposición extraída del campo de la economía política, la de conservadores y liberales o la de pueblos atrasados y pueblos avanzados, por mencionar sólo algunas. Sin embargo, unos y otros no podrán ser sino modernos debido a que en el horizonte de esta modernidad sólo existe la posibilidad de contrastación consigo misma.

Guillermo Zermeño Padilla
La cultura moderna de la historia.

21 mayo 2010

El héroe de este libro es Der Mann ohne Verwandtschaften, el hombre sin vínculos, y particularmente sin vínculos tan fijos y es­tablecidos como solían ser las relaciones de parentesco en la época de Ulrich. Por no tener vínculos inquebrantables y establecidos pa­ra siempre, el héroe de este libro -el habitante de nuestra moderna sociedad líquida— y sus sucesores de hoy deben amarrar los lazos que prefieran usar como eslabón para ligarse con el resto del mun­do humano, basándose exclusivamente en su propio esfuerzo y con la ayuda de sus propias habilidades y de su propia persistencia. Sueltos, deben conectarse… Sin embargo, ninguna clase de cone­xión que pueda llenar el vacío dejado por los antiguos vínculos au­sentes tiene garantía de duración. De todos modos, esa conexión no debe estar bien anudada, para que sea posible desatarla rápida­mente cuando las condiciones cambien… algo que en la moderni­dad líquida seguramente ocurrirá una y otra vez.

Zygmundt Bauman,
Amor líquido. Acerca de la fragilidad de los vínculos humanos.

05 mayo 2010

cuando estas noches quisiera saber menos y dar marcha atrás al poder de mis observaciones. el grado de esta lucidez no tiene madre, ni perdona. si no fuera por el amor que doy y recibo, o por mis estudiantes, el mundo acabaría conmigo bien pronto. tan fácil y bonito que sería tener un par de chamacos y esperar el fin de semana para ir al parque. a veces ese algo que no tengo me parece simple y me conformo con ver crecer a mis sobrinos por puro miedo. acompañarlos me ha ayudado a entender la prioridad de los niños. pienso en todos mis amigos y su hijos, en mi familia y sus hijos. siento un respeto profundo por su valentía y su fe contagiosa de frente a lo que hay. las cosas simples son más difíciles de reconocer, comparto una lógica cegadora con un montón de ilustrados.

hoy vomité en el baño, por primera vez de pura náusea. hay tanto que no comprendo y una cabeza como la mía no sabe de treguas.

necesito algo hermoso.
me siento libre cuando corro. procuro ese calor en mis mejillas y en mis piernas, en los pulmones.


anoche soñé que era una esfera, un universo completo y transparente que viajaba en el tiempo a una velocidad constante. antes me pregunté qué era la luz y por qué la oscuridad del vacío y de las cosas tristes. salí a caminar al patio a las tres am y encontré un montón de estrellas.

29 abril 2010

Quiero este disco:


Mírelo, qué galanura. Y qué portada más alentadora para tratarse de
un embajador de la melancolía citadina desde hace más de 20 años.

Puede bajarse aquí.



Trouble loves me

21 abril 2010

11 abril 2010

Nací en 1975, hija de una secretaria y un peluquero. Mis padres se conocieron en la secundaria nocturna y a principios de junio del 74 me concibieron en Cantamar, una playa de olas bravas que está rumbo a Ensenada. Mi papá era muy bueno para las matemáticas, estaba medio loco y había muchas cosas torcidas en su cabeza. Era también un buen analista de la historia y de las personas, muy atinado en sus insultos y sarcasmos. No me heredó nada material, al contrario, siempre que pudo me robó alguna cosa. Cuando estaba en su juicio me ayudaba a hacer la tarea y me explicaba las lecciones de ciencias sociales, fue él quien me enseñó el significado de la Independencia de México: cada año salía al balcón del cuarto piso del edificio de Infonavit donde vivíamos y justo cuando estaban tronando los cohetes en el Palacio Municipal gritaba, con la bandera de México en la mano: -¡Pueblo, vayan y chinguen todos a su madre!, y se metía muy serio a la casa.

Desde la ventana de ese departamento se veía un cerro despoblado donde ya era Estados Unidos, justo a un lado de la Colonia Libertad. Muchas tardes se quedaba ahí mirando cómo la migra correteaba con sus caballos, con sus trocas y sus helicópteros a los pollos que intentaban cruzar hacia Los y decía: -Nunca voy a ir a ese méndigo país, después se aventaba sus discursos sobre la libertad y terminaba hablando mal de los políticos mexicanos.

Mi mamá en cambio hablaba poco. Estaba siempre ocupada en su trabajo y en la limpieza. Sin embargo, cuando tenía tiempo en las noches nos leía cuentos y nos compraba comics en el mercado. Gracias a eso aprendimos a leer muy pronto. Ella procuró hacerse de varias enciclopedias infantiles para nosotras, que yo devoraba de inmediato.

A mí me encantaban la historia de los planetas, todo lo relaciondo con el origen de la Tierra y con la formación de los continentes. Después, me volví lectora de los orígenes del ser humano, de sus estrategias y modos desde la prehistoria. Es curioso, pero en realidad fui más lectora de ciencias naturales que otra cosa hasta que llegué a la preparatoria y empecé a leer filosofía: primero a Marx y después a Sartre. Ya en la universidad, otro autor que hizo crecer mi conciencia fue Kafka y un poco más tarde Foucault y Wallerstein, recientemente Koselleck, Chartier, Zizek y Sarlo.

Escribo esto porque estoy pensando en la estructura de mis pensamientos. Y a veces me canso, pero me es imposible silenciar lo que sucede aquí dentro,  Parece que estoy en un caos y no es así, se trata de un rizoma.

Sé que tiembla, sé que la Tierra vive antes que nosotros y que desde la CIUDAD no logramos comprender, que nuestra experiencia ya no entiende las señales y sólo logramos sentir miedo e incertidumbre. Sé también que las decisiones hechas desde una política que desconoce el lenguaje de la Tierra y del Tiempo pueden detener un río y emparedarlo detrás de una frontera y un muro de metal, sin pensar en las consecuencias ni en el futuro.

Estoy aquí, preocupada por lo que trasciende. Intento aprender a formar lectores y ciudadanos.