Pensar la virtualidad como tal refiere a una concepción muy limitada del espacio y del tiempo. Si nos dislocamos, suponiendo, y nos atrevemos a creer que el tiempo y el espacio no son lo que hemos creído, ni lo que nos han hecho creer quienes producen los discursos dominantes sobre lo que debe ser real, es posible que reconozcamos que "esa realidad" es lo virtual. Aquello que percibimos y lo que no logramos percibir es una imagen, una producción, un como velo o membrana, cuando lo que es fuera de esa imagen es infinito.
El universo es un concepto que nos encarcela. En oposición, es posible imaginarse que lo que es son múltiples e infinitas capas de la existencia, todas reales. Es posible que no exista un todo, sino inumerables todos: Multiversos: un ser-estar compuesto de lo conocido, lo imaginado y lo inmaginable, todo posible: el sueño es otra forma de ser que sí es; el inframundo es un lugar de tránsito que es; aquí es un lugar donde coinciden todos los tiempos y hay otros.
Insisto, nuestro lenguaje ha sido limitado.
¡Nombremos lo imposible!
¿Cuáles son las consecuencias de la concepción lineal del tiempo?
¿La creencia de que se es en un solo lugar?
De eso se trata este reto, de desencriptar la realidad programada en nosotros para comprender que nuestra existencia puede ser libre, que somos libres y no somos libres. Que es absurdo que vivamos preocupados por nuestra subsistencia, que nos dicten lo que tenemos que hacer, pensar y sentir; así como absurdo es que decidan por nosotros; que nos sometan a tanta angustia, a la pobreza, a una carrera ridícula por participar en el mercado de trabajo, que nos excluyan sistemáticamente; que nos conduzcan a pensarnos como cosas desvinculadas, que usen nuestros cuerpos, que taladren nuestras emociones, que nos sometan al miedo, al terror. Esta "realidad" es falsa, es monstruosa.
PD.
Y del FB del Huracán retomo esta cita, que plantea dos cosas: primera, ya nos dimos cuenta de que vivimos una realidad producida, somos muchos y lo estamos discutiendo; segunda, que la descomposición de esa realidad producida inició hace tiempo y no podíamos "verla" hasta que nos empezó a doler, a rebasar el miedo: cuando decidimos creer no sólo que debe haber habido otras formas de existir, sino que podemos contruirlas.
"En la aldea global configurada por las redes mediáticas actuales la comunicación tiende a ser monodireccional, desde el norte hacia el sur y el este, creando efectos de dependencia económica y cultural, porque la información es mercancía e ideología a la vez [...] Esta dependencia, que empieza en las agencias de noticias, tiene muchas consecuencias, además de las económicas y las lingüistas (el ...hegemonismo del inglés) y van desde la construcción de un imaginario planetario común (que incluye desde la homogeneización del vestido, del fast food o de la música popular) hasta el famoso pensamiento único, que convierte a las leyes del mercado en legitimadoras políticas y sociales supremas, universales e inapelables."
ROMÁN GUBERN. EL EROS ELECTRÓNICO.
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